Hoy hace justo 2 años volví al punto de partida, al lugar que me vio nacer y del que partí hace ya 14 años en busca de nuevos horizontes, tanto geográficos como más íntimos. Pensaba que hace 1 año no había recordado la efemérides, pero me equivoqué. Como siempre y desde que me percato de ello, estos 720 días han sido intensos en todos los sentidos, con cambios inimaginables, comienzos, finales, alegrías, tristezas, despertares, ansiedades, desengaños y planes, muchos planes. Creo que la enseñanza más valiosa de todos estos ciclos diurno-nocturnos ha sido el tomar nuevamente el timón de mi propia vida y recorrer el camino con más conciencia y sin dejar que la mente, esa que es experta en idear, producir y dirigir filmes fantásticos, haga tanto de las suyas.
La sensación mas significativa el día de hoy es la de gratitud, un enorme y profundo agradecimiento a todas aquellas personas, cercanas y lejanas que desde un primer momento me acogieron, me abrazaron, me protegieron, me animaron, me escucharon, me sonrieron y creyeron en mi, porque sin todos/as ustedes la persona que escribe estas palabras no estaría en este lugar.
¿Qué viene ahora? No lo sé, sin embargo, mi intención es disfrutar del viaje de la mejor forma posible, recibiendo todo aquello que la vida me traiga con la mejor actitud, compasión y sobre todo, con una serena postura de humildad y alegría. Observar con infinita curiosidad y ser feliz por el simple hecho de estar aquí y ahora. Esa es la idea!